martes, febrero 22, 2005

Platón y los pájaros. No, no es Hitchcock

Siempre me gustó ese pensamiento platónico en donde las ideas son las que están volando sobre nuestras cabezas, y en que nosotros somos los cazadores que tenemos la suerte de atrapar a una u otra. Es una especie de juego de azar, así que cada vez que me llega una de esas ideas “interesantes” me digo “¡vaya, me he vuelto a sacar la Lotería!”; claro, esto es cuando se da la rara oportunidad en que tengo una o más de esas ideas en un corto período de tiempo. Lo interesante es que a esa idea se le tienen que dar los detalles justos y adecuados, lo que nos da finalmente la autoría. Ahora, el problema es cuando recibo una de esas súper ideas, y que por travesuras de la vida no alcanzo a agarrar con fuerza y se van irremediablemente de vuelta a volar; sólo espero que quien la atrape haga buen uso de ella... a ver si algún día la reconozco en un libro, música o pintura.

Alguna vez leí un cuento en que un avecita usaba un gorro para que no se le escaparan las ideas, y me pareció genial el poder tener uno de esos; sin embargo, ahora pienso que dicho gorro me impediría captar más ideas, así que mejor no me lo regalen. Me conformo con una caja de chocolates, gracias ;)

1 Comments:

Blogger Trenzas said...

Podrías fabricarte una red con el pelo y así tampoco se te escaparían las ideas :))
Tú siempre tienes buenas ideas. Si se fueron un par o media docena, tranquila que vuelven. Esas u otras mejores. Apunta lo que recuerdes y tira del hilo. Y no permitas que otro las agarre.

4:39 a. m.  

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