Cambio de aire... o lo que el viento no se alcanzó a llevar

Ya estoy con mi maleta medio lista, y es que mañana por la noche nos vamos con mi mamá a Villarrica y alrededores. Y como ya les prometí, estoy cargando las pilas de la cámara para volver con muchísimas fotografías como ya es costumbre.
Y hablando de mi afición por creerme Luisa Lane o Peter Parker, el viernes hicimos una juntación con los chicos del laboratorio; Cristian prestó gentilmente su casa pero de improviso llegaron unos maestros a hacer un trabajo pendiente, por lo que nos tuvimos que reunir finalmente en la casa de su hermano (que al fin y al cabo, está en la misma parcela). Y por supuesto tomé las respectivas fotografías y armé la fotocrónica de rigor :) Para verla, hagan click AQUÍ.

El sábado anduve con bastante sueño, por supuesto, pero no me impidió disfrutar del matrimonio de uno de mis primos. Fue sólo por el civil (el de la iglesia viene en abril), por lo que fue sin baile aunque con mucha comidita ÑAM ÑAM! (Sherezada súper triste, jeje). Y además de luchar por no comerme todos los pastelitos y canapés, tuve que adoptar la actitud "espantafuturasuegra", porque la señora que tuve toda la noche junto a mí quedó deslumbrada cuando, luego de conversarle casi toda mi vida, supo que tenía 27 años.

Señora-no-futura-suegra: uuuy!!!! jejejeje, pero si mi hijo tiene la misma edad tuya!! Ahhhhhh - y dirigiéndose a mi papá: -oye, mira, ya encontré a mi futura nuera!

Debo decir que mi papá no dijo esta boca es mía, por lo que mi primita linda linda salió en mi defensa:
Primia-ita-ita: no, prima! Ni se te ocurra, que ese loco era yunta con mi hermano -el que se estaba casando-, demasiado mujeriego!
Ahí me terminé de espantar. Sólo espero que la novia no haya escuchado semejante comentario XD Así que, como mi Manual-anti-suegras-autoimpuestas decía bien clarito, me hice la muy exigente en cuanto a hombres. Pero no tuve que "defenderme" mucho más, porque de a poco cada vez se le entendía menos lo que decía, vaya uno a saber si su pisco sour estaba muy fuerte... lo cierto es que luego lo único que hacía era reírse y ya mejor nos vinimos porque era tarde.
Lo mejor fue que mi tía nos mandó con un tremendo trozo de pastel para la casa! Pucha que me cae bien mi tía.

Ya los dejo porque no quiero que esta vez se me quede el pijama (como en el último terreno), en una de esas y puedo postearles algo desde Villarrica o Valdivia, y les adelanto alguna cosita.